¡Solo 5 ingredientes y sin complicaciones!
Este pastel de queso y fresa es el postre más fácil que jamás hayas preparado: dulce, cremoso y rebosante de fresas. ¡Solo vierte la mezcla, hornea y disfruta! 
Ingredientes:
1 caja de mezcla para pastel amarillo o blanco
1 lata (21 oz) de relleno para pay de fresa
1 paquete (8 oz) de queso crema ablandado
½ taza de azúcar granulada
1 cucharadita de extracto de vainilla
½ taza de mantequilla sin sal derretida
Instrucciones:
Precalienta el horno: Precalienta el horno a 175 °C (350 °F) y engrasa un molde para hornear de 23 x 33 cm.
Relleno de fresa en capas: Extiende el relleno de fresa en el fondo del molde.
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Prepara la capa de cheesecake: En un tazón, bate el queso crema, el azúcar y la vainilla hasta que esté suave. Vierte la mezcla de queso crema sobre el relleno de fresa y extiéndela suavemente.
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Agrega la mezcla para pastel: Espolvorea la mezcla seca para pastel uniformemente por encima, ¡sin mezclar! Cubrir con mantequilla: Rocíe la mantequilla derretida uniformemente sobre la mezcla para pastel.
Hornear: Hornee durante 40-45 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y burbujeante.
Enfriar y servir: Deje enfriar un poco antes de servir. ¡Disfrútelo caliente o frío!
Cremoso, afrutado y mantecoso, este pastel de queso y fresa es el postre más fácil que jamás haya preparado.
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